lunes, julio 21, 2008

Posted by Sonia
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Cuando te conocí,
ya no salías,con el primero,
que te había abandonado.

No vale la pena hablar,
de aquellos años pasados.

Cuando te conocí,
ya no salías,
con aquel chico,
casado.

Que te prometía,
que la dejaría,
y todavía no se había,
divorciado.

Cuando te conocí,
salías con un amigo,
de los pocos que tenías.

Eras lo mejor,
de su vida,
pero fuiste,
lo mejor de la mía.

Cuando te conocí,
miré por un agujero,
en tus pantalones.

Y dos años después,
ya tomabas todas,
las decisiones.

Cuando te conocí,
te reconocí,
por tus botas.

Y mientras tomabas,
tequila,
dejamos atrás,
dos almas rotas.

Cuando te conocí,
me dijiste que por mí,
no ibas a cambiar.

Ibas a seguir,
siendo igual.

Ibas a seguir,
siendo igual.

Y en el fondo,
es tan hondo mi dolor.

Porque me voy,
y no se puede cambiar,
de corazón como de sombrero,
sin haber sufrido primero.

Y en el fondo,
es tan hondo, mi dolor.

Porque me voy,
y no se puede cambiar,
de corazón como de sombrero,
sin haber sufrido primero.

Cuando te conocí,
me dijiste que por mí,
no ibas a cambiar.

Ibas a seguir,
siendo igual.

Ibas a seguir,
siendo igual.

Y en el fondo,
es tan hondo mi dolor.

Porque me voy,
y no se puede cambiar,
de corazón como de sombrero
sin haber sufrido primero.

Y en el fondo,
es tan hondo mi dolor.

Porque me voy,
y no se puede cambiar,
de corazón como de camisa,
sin perder la sonrisa.

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